De Equinoterapia a Equitación

"Traslación de pacientes de equinoterapia a Jinetes de Equitación", una capacitación dirigida a personas que tengan un familiar con discapacidad, trabajen en discapacidad, también para público en general.
Luciano "Lucho" Moreno, su nombre se asocia inmediatamente a equinoterapia, él como profesional ha crecido enormemente a la par de sus alumnos, a los que no solo les transmite los beneficios de la disciplina, si no que los contagia de muchos otros valores.
El sábado 13 se realizará la primera capacitación, con el acompañamiento de importantes profesionales en el tema, Samanta Pérez Cesaretti, Doctora en Neuropsicología de la Provincia de Mendoza, que viene acompañada por Santiago y Ruth Salas que estarán representando al país en el Mundial de Berlín en poco menos de un mes. Samanta acompaño a un jinete de María Teresa al Mundial de Abu Dhabi hace dos años. La experiencia de la profesional está más que probada.
La organización se hizo en conjunto con Olimpíadas Especiales, abarca personas con discapacidad intelectual y abarca todos los deportes.
"No va a ser una charla informativa, también es para concientizar, capacitar y sensibilizar. El peso de las palabras de una profesional tan importante tiene otra trascendencia".
Dentro de la charla se van a escuchar testimonios de familiares de alumnos de la Escuela.
"Próximo evento será la presentación de libros de una autora rufinense que actualmente vive en San Luis. La idea" reitera Lucho, "es capacitar y concientizar".
El lugar de la charla es el Rotary Club a partir de las 10. Es con capacidad limitada. Una oportunidad única. La charla es gratis, lo único que se cobrará es el almuerzo criollo que se realizará en el campo de "A todo Galope" en el cual los chicos van a hacer una práctica.Se pueden inscribir en la página Escuela Equinoterapia Rufino.
La escuela en este momento cuenta con ocho caballos, para su mantenimiento y el del propio campo, Lucho agradece la colaboración de Juan Carlos Cifre, Damiana Alós y especialmente a los que adquieren bonos de colaboración. Concluye con una frase conmovedora, nosotros no hablamos de inclusión, nosotros la vivimos. La prueba: a cargo de la locución, Alfredo Arosa.