¿Por qué están triunfando los eSports? Las causas tras este fenómeno

Los deportes electrónicos son una versión competitiva de los videojuegos. Es decir, se trata de eventos retransmitidos, en forma de torneos o campeonatos, en los que diversos equipos se enfrentan jugando a alguno de los títulos más populares del universo “gaming”. Si bien este tipo de actividad no es nuevo, lo cierto es que su seguimiento se ha acelerado en los últimos 10 años. En la actualidad, ya supera los 500 millones de espectadores al año en todo el mundo. Y se espera que entre 2024 y 2025 se acerque a los 600 millones. Por lo tanto, estamos hablando de una importante masa social. De hecho, a nivel de audiencia, ya supera a algunos de los deportes tradicionales más populares. Pero, ¿cuáles son las causas que han propiciado este crecimiento y consolidación?
En primer lugar, debemos atender al cambio generacional propio de la sociedad. Las nuevas generaciones son nativas en una tecnología mucho más avanzada, han tenido mucho más a mano los videojuegos y, además de jugar, han visto el desempeño de expertos a través de las redes sociales. Por tanto, han estado mucho más expuestos a lo que hoy se conoce como eSports. Por otra parte, sus gustos son más afines a este tipo de actividades y al ocio digital, incluso por encima de los deportes tradicionales.
Las redes sociales son el vehículo predilecto para la retransmisión y los comentarios relacionados con los eSports. Este es un valor de gran importancia para las citadas generaciones, que han elegido este medio como predilecto para sus comunicaciones. Por otra parte, ha ayudado a darle un carácter internacional a estos eventos, ya que el acceso a estas redes (principalmente Twitch) no depende de zonas geográficas, con lo que los aficionados pueden seguir los torneos que se celebran alrededor del mundo. En muchos casos, además, con grandes atractivos, como finales absolutas o competencias dotadas de grandes premios económicos. Digamos que estas plataformas han representado una ayuda orgánica (casi involuntaria) para la consolidación de este fenómeno.
Pero los organizadores también tienen sus propias iniciativas para aumentar su público. La estrategia, en los casos más avanzados, es crecer a nivel multidisciplinar y crear poderosas sinergias. Por ejemplo, League of Legends, que lidera las audiencias y las visitas a los portales de apuestas en sus secciones para las citas ineludibles de competencias de LOL, buscó la fórmula para llegar a un público más amplio mediante el contenido audiovisual. Arcane, la serie basada en su universo creativo, fue una verdadera apuesta por la calidad en la animación y consiguió todos sus objetivos con nota. Es una de las producciones recientes más laureadas y con mejor recepción por parte de los espectadores dentro de las plataformas de streaming. En este caso, fue Netflix quien apostó con fuerza por el proyecto. Y le salió muy bien la jugada.
La publicidad es el gran sustento de los deportes electrónicos (representa entre un 70% y un 80% de sus ingresos). Las marcas son conocedoras del éxito de estas disciplinas electrónicas entre el público y, además, tienen un gran interés en ese “target”. Nos referimos a unos seguidores que son jóvenes y van adquiriendo, cada vez, más poder adquisitivo. Además, son un tipo de consumidor al que es difícil llegar por otras vías. Esto explica la gran cantidad de marcas que eligen a los eSports como uno de sus principales escaparates publicitarios, patrocinando eventos, campeonatos o, incluso, ligas. Al principio, estas marcas formaban parte del nicho tecnológico; pero, hoy, ya son bancos, productos alimentarios y de gran consumo o fabricantes de prendas deportivas, entre otros, los que se anuncian a través de los deportes electrónicos. Más ingresos implican más eventos y, por tanto, mayor repercusión global.
Estas son sólo algunas de las razones para explicar este éxito. Pero hay más, por supuesto. Como la gran cantidad de caras conocidas que se asocian a estas actividades digitales. Es el caso de muchos deportistas de élite que han creado sus propios equipos de eSports. Y también la innegable aportación de los populares “sreamers”, como Ibai Llanos y tantos otros, que congregan multitudes y son la cara visible (a través de las retransmisiones) de los grandes eventos. Lo que parece claro es que este fenómeno no tiene visos de estancarse. Bien al contrario, pronto superará en seguimiento a algunos de los más importantes deportes que han dominado las audiencias durante décadas.